A la deriva

Publicado por primera vez en Bienmesabe de El Estímulo.com el 6 de agosto de 2018, escito por Radhanaris García bajo el título

06/08/2018

 

 

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TEXTO: RADHANARIS GARCÍA / FOTOS: CORTESÍA DE MUNDO DE PELÍCULA Y CINESUNIDOS

Ante las catástrofes el amor nutre el alma y la mantequilla de maní al cuerpo. Descubrimos qué comen los náufragos de la película A la deriva.

Descubrir los gustos alimenticios entre las parejas puede generar situaciones incómodas como cuando uno es vegetariano y el otro omnívoro. Lo mejor sucede al compartir el deleite por algo tan simple como la mantequilla de maní, que evoca dulces recuerdos de las mejores sonrisas, por eso este producto de frutos secos es el Protagonista Culinario de A la deriva.

Una joven vegetariana aventurera llamada Tami, interpretada por Shailene Woodley, se enamora de Richard, un apuesto y solitario marino, encarnado por Sam Claflin, a quien se suma para trasladar un yate desde Tahití, en la Polinesia Francesa, con destino a San Diego en los Estados Unidos. El plan perfecto es propuesto en una comida casual en un restaurante de la isla por unos viejos amigos y ellos acceden porque la recompensa es muy atractiva, aparte de que aviva las ganas de descubrir el mundo juntos.

La trama está basada en una historia de la vida real donde en 1983 una embarcación que partió desde las islas del Océano Pacífico con destino a California se ve afectada por los embates del huracán Raymond, y sus tripulantes hacen lo posible por mantenerse con vida, confiando en su amor y los conocimientos adquiridos en viajes previos por diferentes mares.

Luego de quedar en el medio del mar con el barco en malas condiciones comienza la búsqueda de las provisiones que permitirán la subsistencia hasta el anhelado rescate. La alegría por encontrar un frasco nuevo de mantequilla de maní se revela al comerla directo con los dedos y paladearla con gusto después de superada la dificultad de abrirla con las pocas fuerzas físicas.

Las mantequillas de nueces son fuentes de proteínas, nutrientes y grasas que proveen saciedad al cuerpo humano. Por el gran contenido calórico que aportan pueden mantener altos los niveles de energía de quienes la consumen. La mantequilla de maní, especialmente, es la favorita de muchos paladares y está muy presente en la dieta de los norteamericanos, por lo que Tami al descubrirla sucumbe ante la emoción y la engulle sin protocolo.

Hacer untables o mantequillas de nueces en casa es muy fácil, solo con moler en licuadora o procesador de alimentos los frutos secos en periodos cortos de tiempo para obtener la pasta. En Bienmesabe compartieron esta receta ( http://elestimulo.com/bienmesabe/mantequilla-de-mani/ ) de mantequilla de maní casera que se puede hacer siguiendo sus instrucciones y disfrutarla sobre pan tostado, con la fruta favorita o sola directo de la cuchara cuando nadie los vea.

Al pasar de los días, contar nuevamente los recursos para sobrevivir al inclemente clima en medio del basto océano es primordial, algunas latas de sardinas y otras de contenido desconocido, porque han perdido la etiqueta, garantizan la prolongación de la vida. Pero, ¿qué sucede si quien naufraga es vegetariana?, no le queda otra opción que consumir la proteína animal al alcance y posteriormente amarse de valor para conseguir directamente de la naturaleza el sustento, aunque incluya matar algún animal.

Sedienta por agua dulce, al agotarse la reserva del yate, Tami recibe como una bendición un poco de lluvia y realmente sacia su deseo al encontrar unas botellas de Ginger Ale. Tomar esta bebida a base de agua carbonatada, azúcar, limón y jengibre es común para los navegantes ya que se le atribuyen propiedades antináuseas y mareos, además de ser base perfecta para numerosos cocteles alcohólicos que se pueden disfrutar durante la travesía.

En las escenas finales degustar la jugosidad de una manzana roja que le hace cerrar los ojos a quien la come le permite reconciliarse con el esfuerzo hecho hasta el momento para mantenerse con vida. Ya no solo el recuerdo de haber compartido los hermosos atardeceres en el horizonte de vibrantes colores naranjas, rojos y rosas serán parte de la fatídica aventura que se vivió, sino todo lo que de ahora en adelante adquiere un nuevo valor como morder un trozo de fruta fresca.

A la deriva es una cinta para adultos porque contiene escenas con sangre y heridas abiertas que causan estupor en personas sensibles. El balance de suspenso y romance  entre escenas que van al pasado y vuelven al futuro está bien logrado, y mantienen al espectador en la espera del desenlace hasta con  lágrimas en los ojos. La fotografía y la cinematografía invitan a querer navegar a pesar de las circunstancias que ocurren en el filme.

Ficha Técnica:

Título original: Adrift (2018)

Duración: 96 min.

País: Estados Unidos

Género: Suspenso. Romance.

Dirección: Baltasar Kormákur

Guion: Aaron Kandell, Jordan Kandell, David Branson Smith

Reparto: Shailene Woodley, Sam Claflin, Jeffrey Thomas, Elizabeth Hawthorne, Grace Palmer, Tami Ashcraft, Siale Tunoka, Zac Beresford, Luna Campbell

Sinopsis: Basada en una historia de la vida real, Tami y Richard  partirán en un viaje a través del océano, sin imaginar que navegarán directamente hacia uno de los huracanes más catastróficos de la historia. A raíz de la tormenta, Tami despertará y encontrará a Richard gravemente herido y su barco en ruinas. Sin esperanza de rescate, Tami deberá encontrar la fuerza y la determinación para llegar a tierra a salvo junto con el hombre que ama. ¿Los salvaran o naufragarán?